Mageirocofobia como el miedo a la cocina
La mageirocofobia, o el miedo a cocinar, puede tomar muchas formas. Algunas personas solo tienen miedo de cocinar para grupos grandes, mientras que otras tienen miedo de preparar huevos revueltos. La mageirocofobia es extremadamente común, aunque solo se considera una fobia cuando es lo suficientemente grave como para interferir con la vida diaria..
Los tipos
La mayoría de las personas que temen cocinar realmente temen uno o más elementos o los posibles resultados del proceso de cocción. Sin embargo, si su mageirocofobia es grave, es posible que la mayoría o todos estos elementos se apliquen a usted..
- Miedo a causar enfermedades: parece ser la fobia a la cocina más común de todas. Es cierto que hay una serie de posibles enfermedades transmitidas por los alimentos, y la cobertura de los medios de comunicación nos ha llevado a creer que son bastante comunes. Las personas que tienen este miedo generalmente tienen miedo de la contaminación, el deterioro y la falta de cocción. Este temor puede ser más común en aquellos que no entienden completamente el razonamiento detrás de muchas "reglas de alimentación", así como en aquellos que pasan mucho tiempo leyendo sobre enfermedades transmitidas por alimentos..
- Miedo a servir comida no comestible: esta fobia se puede dividir en muchos factores. Muchos cocineros están abrumados por las opciones de condimentos. No confían en sus propias habilidades para mezclar sabores o determinar las mejores opciones para cada plato. Muchos cocineros temen que los alimentos se cocinen en exceso o que estén secos o empapados.
- Problemas de presentación - Algunos cocineros son perfeccionistas. Es posible que se preocupen por el aspecto de los alimentos, si los vasos están completamente libres de manchas e incluso si el mantel está perfectamente centrado. Esta fobia parece ser provocada con mayor frecuencia cuando se da una cena o se entretiene de otra manera en casa. Sin embargo, algunos cocineros experimentan esto incluso cuando cocinan para una familia cercana.
- Miedo al proceso de cocción: muchos cocineros se preocupan por cortarse, quemarse o tener otras dificultades con el proceso. Algunos temen las técnicas que no comprenden completamente, desde el escaldado hasta la caza furtiva..
- Miedo a las recetas: algunos cocineros se sienten intimidados por las recetas que parecen complicadas o demasiado largas. Pueden cuestionar su capacidad para realizar todos los pasos o preocuparse por perder un paso..
Complicaciones
Muchas personas pueden hacer frente con éxito a la mageirocofobia leve a moderada simplemente evitando los elementos específicos de la cocina que los ponen nerviosos. Sin embargo, los casos más graves de fobia pueden llegar a limitar la vida. Vivir con cualquier fobia puede llevar a complicaciones que van desde la depresión hasta otros trastornos de ansiedad. Además, la cocina desempeña un importante papel emocional en la vida de muchas personas, lo que hace que la mageirocofobia sea particularmente devastadora..
Muchas familias y grupos de amigos disfrutan de reunirse para las comidas, especialmente durante las vacaciones. Estos eventos son a menudo de la naturaleza, y puede sentirse incómodo ser siempre el que trae servilletas o papas fritas. Alternativamente, algunos grupos se turnan para organizar cenas elaboradas, y la incapacidad de reciprocidad puede hacer que se sienta inadecuado.
Además, muchas personas se preocupan por su mageirocofobia cuando tienen hijos. Es posible que sienta la responsabilidad de alimentar a sus hijos con comidas caseras y saludables, y sentir culpa o ansiedad cuando eso no sucede..
Algunas personas con esta fobia se casan con alguien a quien le encanta cocinar. Al principio, su pareja puede realmente disfrutar de la cocina para usted. Sin embargo, con el tiempo, él o ella podría comenzar a resentirse nunca teniendo un día libre de este deber. También puede comenzar a sentirse culpable o incluso dependiente, ya que su pareja le está proporcionando su sustento..
Tratamiento
Dependiendo de su gravedad, el miedo a cocinar puede tratarse de varias maneras. Si su fobia es grave o limita su vida, la terapia cognitivo-conductual puede ayudarlo a aprender a reemplazar sus miedos con un diálogo interno más positivo. Los medicamentos pueden ser útiles para controlar una fobia verdaderamente obstinada.
Una vez que tu fobia ya no sea abrumadora, es posible que te resulte útil aprender y practicar nuevas habilidades de cocina. Sin embargo, intentar forzarte a través de la fobia puede empeorarlo, ya que cocinar requiere una curva de aprendizaje bastante pronunciada. Es importante estar psicológicamente preparado para manejar los errores inevitables antes de continuar, o puede empeorar la fobia.
Con el tratamiento adecuado, la mageirocofobia puede ser manejada exitosamente. Lea sobre cómo encontrar un terapeuta para obtener consejos sobre cómo elegir un profesional de salud mental confiable.