Pruebas de falsos positivos para enfermedades de transmisión sexual
La calidad de la prueba es siempre una cuestión de equilibrar la necesidad de tratar de detectar tantos casos como sea posible (sensibilidad) con la necesidad de no diagnosticar a las personas que no están realmente enfermas (especificidad). Desafortunadamente, es difícil diseñar pruebas que sean buenas para ambos. Por lo tanto, los científicos tratan de averiguar qué resultado es peor en cualquier situación: un falso positivo o falso negativo y sopesan las cosas en consecuencia.
En general, si omitir un diagnóstico podría causar daños a largo plazo, y los tratamientos para una afección no son particularmente peligrosos o desagradables, los médicos preferirían arriesgarse a realizar pruebas falsas positivas. En tales situaciones, es mejor sobre diagnosticar y sobre tratar. Sin embargo, si ser diagnosticado incorrectamente podría causar un daño grave, ya sea físicamente a través del uso de tratamientos peligrosos o emocionalmente debido al estigma asociado con una infección, entonces es mejor diagnosticarlo. Si se olvida de un caso, debido a un falso negativo, aún puede tratar de contraer la enfermedad en una etapa posterior cuando la condición es más clara..
Preocupaciones clínicas sobre pruebas de herpes falso positivo
Los médicos están muy preocupados por las pruebas de herpes falsos positivos. Debido a que el herpes es muy común y muchas personas nunca tienen síntomas, los médicos no consideran que faltar un diagnóstico sea algo muy importante. En contraste, los médicos saben que la enfermedad está tan estigmatizada que una prueba falsa positiva podría cambiar la vida de una manera muy negativa. En otras palabras, esta es una situación en la que los médicos piensan que es más para evitar falsos positivos que perder la oportunidad de diagnosticar una infección por herpes..Debido a la preocupación por las pruebas de falsos positivos, los médicos a menudo se muestran reacios a realizar pruebas para detectar el virus en ausencia de síntomas o una exposición conocida, incluso aunque existan análisis de sangre. Es una preocupación legítima. El valor predictivo positivo de una prueba es la probabilidad de que una persona realmente tenga una enfermedad cuando la prueba da positivo. El factor más importante involucrado en ese cálculo es cuánta gente en la población examinada se espera que realmente tenga la enfermedad.
¿Qué significa eso en el caso del herpes genital? Las investigaciones sugieren que aproximadamente el 16 por ciento de los adultos estadounidenses sin síntomas están infectados con herpes genital. Si bien eso es mucho, no es lo suficientemente alto como para compensar las limitaciones de los análisis de sangre para el herpes con fines de detección. Un artículo de 2016 realizó algunos cálculos y encontró que, en personas sin síntomas, una prueba de herpes positiva solo sería correcta la mitad del tiempo.