Entender la pérdida de peso causada por la quimioterapia
Al final, todos responden de manera diferente a la quimioterapia, y hay muchos factores que influyen en la forma en que el tratamiento afectará su peso. Claro, hay algunos que perderán peso, pero hay otros que ganan, también.
Comprender sus necesidades nutricionales y los posibles efectos secundarios del tratamiento son los primeros pasos para garantizar que mantenga su peso ideal durante el curso de la quimioterapia.
Factores que contribuyen a la pérdida de peso
Cuando las personas pierden peso durante el tratamiento del cáncer, la mayoría de las veces se debe a una incapacidad para mantener una buena nutrición. La quimioterapia a veces puede causar náuseas y una pérdida general de apetito, mientras que los vómitos y la diarrea pueden afectar su capacidad para retener los nutrientes de los alimentos que consume..A veces, los alimentos pueden tener un sabor y un olor muy diferentes, incluso malos, como resultado del tratamiento contra el cáncer. Por esta razón, solo, muchos especialistas recomiendan evitar sus alimentos favoritos, ya que cualquier cambio en el gusto o el olfato se percibirá con mayor profundidad, lo que crea una aversión a ellos incluso después de completar el tratamiento..
Las llagas en la boca también pueden ser un efecto secundario de la quimioterapia. Tenerlos en las encías, la garganta, la lengua o la mejilla interna puede hacer que comer ciertos alimentos sea extremadamente difícil, lo que exacerba el dolor que quizás ya esté sintiendo. Las comidas picantes, saladas o ácidas son especialmente problemáticas.
Mantener el peso durante la quimioterapia
Uno de los objetivos principales de salud por los que debe esforzarse durante la quimioterapia es mantener su peso estable. Si tiene sobrepeso, ahora no es el momento de comenzar a perder. Sin embargo, puede concentrarse en tener una dieta más saludable, que pueda trasladar después del tratamiento para alcanzar su peso ideal..Si su médico considera que puede hacerlo, trabaje en conjunto para crear un plan de ejercicios que satisfaga sus necesidades de acondicionamiento físico. Caminar, hacer yoga y otras formas de ejercicio no solo son formas ideales de mantenerse en forma, también pueden ayudar a aliviar el estrés, elevar el estado de ánimo e incluso reducir la fatiga..
Trabajar con un dietista experimentado en terapia contra el cáncer puede ser extremadamente beneficioso. Un profesional capacitado en las necesidades nutricionales de una persona con cáncer podrá formular, controlar y ajustar su dieta a medida que avanza en el tratamiento. La mayoría de los centros oncológicos tienen un nutricionista en el personal o pueden referirse a un profesional certificado en su área.
Una palabra de Verywell
Casi no hace falta decir que la buena nutrición es esencial durante la quimioterapia. Si su ingesta calórica es demasiado baja, puede conducir a la pérdida de peso al tiempo que reduce su capacidad para hacer frente física y mentalmente a su tratamiento..La mala nutrición también puede llevar a una disminución en sus recuentos de células sanguíneas, lo que resulta en anemia, neutropenia o trombocitopenia. Esto no solo hará que se sienta cansado y fatigado, sino que también puede provocar la interrupción de la terapia hasta que se recuperen sus niveles..
Además de una buena nutrición, el ejercicio de cualquier tipo puede ser beneficioso si se lo aborda con prudencia y bajo la supervisión de un profesional médico. Incluso una pequeña actividad al aire libre (como la jardinería) puede prevenir la pérdida de masa muscular magra clave para mantener la fuerza y la movilidad.
Por otra parte, no se recomienda el esfuerzo excesivo, ya que no solo puede desgastarlo, sino también causar una inflamación que puede empeorar cualquier efecto secundario que pueda estar experimentando..
Una buena planificación, una dieta equilibrada y un enfoque moderado de la condición física son tres cosas que necesita para asegurarse de cumplir sus objetivos de salud durante el curso de la quimioterapia.