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    Síntomas y tratamiento del síndrome de Os Trigonum

    El os trigonum es un hueso pequeño y redondo que se encuentra justo detrás de la articulación del tobillo. Está presente en alrededor del 5-15% de las personas. Un os trigonum ocurre cuando un área del hueso no se fusiona con el resto del astrágalo (hueso del tobillo) durante el crecimiento..

    Diagnóstico

    La razón más común por la que las personas se enteran de que tienen un os trigonum es que tienen una radiografía para ayudar a diagnosticar el dolor en el tobillo. Un hallazgo incidental es algo que ocurre muy comúnmente en la medicina: cuando se busca una cosa, se descubre algo completamente diferente. A menudo, cuando se realiza una radiografía, su médico puede notar hallazgos que no tienen nada que ver con el motivo de la radiografía. A menudo, estos hallazgos incidentales ni siquiera están en el mismo lugar, pero aparecen en la radiografía. La verdad es que el os trigonum rara vez es la causa del dolor en el tobillo. Normalmente, tener un os trigonum no tiene ninguna consecuencia.

    Los síntomas

    En algunas personas, sin embargo, este pequeño hueso puede quedar atrapado en la parte posterior del tobillo e incluso evitar el movimiento normal. Esto se ve más comúnmente en los bailarines de ballet que asumen posiciones de pointe y demipointe. Estas posiciones maximizan plantarflex el tobillo (apuntan los dedos hacia abajo), y pueden hacer que el trigonum se pellizque en el espacio detrás del tobillo.
    El otro hallazgo común en individuos con síndrome de os trigonum es sensibilidad directamente en la ubicación del hueso anormal. Existen otras causas de dolor en la parte posterior del tobillo, que incluyen anomalías del cartílago del tobillo, problemas del tendón de Aquiles, bursitis retrocalcánea y otros tipos de tendinitis..

    Tratamiento

    Si se observa un os trigonum en una radiografía, y se sospecha que existe un síndrome del mismo, una IRM puede ser útil para detectar la acumulación de líquido tanto dentro como alrededor del hueso anormal. El tratamiento generalmente comienza con pasos simples. Si las modificaciones de descanso y actividad no alivian los síntomas, se puede considerar una cirugía para extirpar el hueso anormal en la parte posterior del tobillo..