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    Impulsividad y agresión en la depresión infantil.

    Cuando se trata de la impulsividad y la agresión, la depresión en los niños puede jugar un papel. Algunas investigaciones encuentran que los comportamientos impulsivos y agresivos están asociados con la depresión en niños y adolescentes.

    Para algunos niños y adolescentes deprimidos, sus emociones pueden hacer que se sientan enojados con las personas o cosas que creen que son la fuente de su dolor, lo que lleva a reacciones impulsivas y agresivas..

    Factores de riesgo 

    La depresión mayor y los trastornos bipolares son factores de riesgo para la agresión, según Christopher J. Ferguson, Ph.D., y sus colegas, que publicaron un estudio sobre los factores de riesgo de suicidio en jóvenes en Psiquiátrica trimestral en 2005.

    De hecho, el aislamiento social en combinación con la depresión es un factor de riesgo específico para el comportamiento agresivo en niños en edad escolar. Es por eso que los niños que son hospitalizados por trastornos del estado de ánimo severos, y por lo tanto están en riesgo de aislamiento social, son evaluados de cerca para el riesgo de comportamiento impulsivo y agresivo.

    Las conductas impulsivas y agresivas son más comunes en los niños deprimidos que en las niñas, pero pueden ocurrir en ambos..

    Cómo se ven los comportamientos impulsivos y agresivos

    Las conductas impulsivas son reacciones rápidas a los eventos (generalmente negativas) sin tener en cuenta las consecuencias. Por ejemplo, una llamada telefónica que revela noticias no deseadas o negativas puede llevar a que un niño tire el teléfono y lo rompa..

    Los comportamientos impulsivos a menudo, pero no siempre, conducen a comportamientos agresivos. Las conductas agresivas pueden ser dirigidas hacia adentro en forma de autolesión, o hacia alguien o algo más a través de arrebatos enojados, hostigamiento, daños a la propiedad o violencia..

    Para continuar con el ejemplo, como resultado de la noticia del evento negativo, el niño puede intentar dañar verbal o físicamente a la persona que dio la mala noticia..

    Estos ejemplos no son representativos de cómo reaccionarían todos los niños con depresión en una situación negativa. De hecho, los comportamientos impulsivos y agresivos se asocian con frecuencia con trastornos perturbadores como el trastorno de conducta y el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y trastornos de la personalidad como los trastornos de personalidad límite, narcisistas e histriónicos.

    Un niño con comportamientos impulsivos o agresivos en algunos casos puede ser descrito como "de cabeza caliente", "agresivo", "enojado" o "impredecible".

    Lo que los padres pueden hacer

    Si nota que su hijo muestra comportamientos impulsivos o agresivos dirigidos a sí mismo oa los demás, hable con su pediatra u otro proveedor de atención de salud mental para encontrar la fuente de su comportamiento y buscar tratamiento..

    Los altos niveles de comportamiento impulsivo y agresivo están asociados con el riesgo de suicidio en niños y adolescentes, lo que hace que el tratamiento eficaz sea aún más importante.

    Si su hijo tiene depresión con conductas impulsivas y / o agresivas, ciertos tratamientos pueden ser más efectivos para disminuir estas conductas, como el entrenamiento de habilidades de afrontamiento, el manejo de la ira y ciertos medicamentos dirigidos hacia el control de impulsos..