El uso de AINE para el dolor crónico
Muchos AINE están disponibles para la compra sin receta, aunque los formularios más fuertes pueden requerir una receta médica. Algunos AINE están disponibles solo en la prescripción. Estos son los AINE más utilizados para el dolor crónico.
AINE de venta libre para el dolor crónico
- Aspirina (Bayer): La aspirina es uno de los AINE más antiguos y ha existido por más de 100 años. Es fácilmente disponible y barato. La aspirina es efectiva contra los dolores de cabeza, dolores musculares y dolores de artritis. La aspirina también es un anticoagulante; muchas personas toman regularmente aspirina para reducir el riesgo de desarrollar coágulos, lo que puede provocar un ataque cardíaco o un derrame cerebral. Sin embargo, su acción de adelgazamiento de la sangre significa que cualquier tipo de sangrado tardará más tiempo en controlarse. La aspirina puede irritar el revestimiento del estómago, aunque hay formas amortiguadas disponibles para contrarrestar esto.
- Ibuprofeno (Advil, Motrin): El ibuprofeno es un AINE que se usa a menudo para tratar dolores de cabeza, dolores musculares y esguinces (incluido el dolor de espalda) y el dolor de la artritis. Funciona al bloquear ciertas enzimas que causan inflamación en el lugar de la lesión o irritación. El ibuprofeno es generalmente más fuerte que la aspirina y, a menudo, es menos irritante para el estómago. Sin embargo, las úlceras estomacales siguen siendo un efecto secundario potencial del uso prolongado de ibuprofeno. El ibuprofeno no se recomienda para personas con enfermedad renal o hepática, o para quienes beben regularmente cantidades moderadas de alcohol..
- Naproxen (Aleve): Naproxen es un AINE similar al ibuprofeno. Puede usarse para controlar dolores de cabeza, dolores musculares y artritis. Sin embargo, si está tomando naproxeno de venta libre, puede tomarlo con menos frecuencia que con el ibuprofeno o la aspirina. El naproxeno es generalmente más suave en el estómago que la aspirina, sin embargo, el uso prolongado puede causar molestias o daños gastrointestinales (GI).
- Ketoprofeno (Orudis): El ketoprofeno es un AINE comúnmente utilizado para controlar tanto la artrosis como el dolor de artritis reumatoide; Sin embargo, también es eficaz contra dolores de cabeza y dolores musculares. El ketoprofeno funciona como el ibuprofeno y el naproxeno, aunque puede ser más irritante para el estómago. El uso prolongado de ketoprofeno puede provocar daño renal o hepático, y no se recomienda para personas que beben regularmente cantidades moderadas (o más) de alcohol..
AINE de prescripción para el dolor crónico
- Meloxicam (Mobic): El meloxicam es un AINE recetado que se usa a menudo para tratar el dolor de artritis, incluida la osteoartritis y la artritis reumatoide. El meloxicam es más suave para el estómago que la mayoría de los otros AINE, incluido el ketoprofeno, que a menudo se usa para los mismos diagnósticos. Sin embargo, el uso regular de meloxicam puede ponerlo en riesgo de sufrir molestias gastrointestinales..
- Celecoxib (Celebrex): Celecoxib es un AINE recetado que ayuda a controlar el dolor de articulaciones y artritis, dolores musculares y dolores y dolor asociados con la inflamación. Al igual que el meloxicam, es uno de los AINE más suaves para el estómago; sin embargo, el uso prolongado de celecoxib puede llevar a úlceras y sangrado GI. También existe cierto riesgo de eventos cardiovasculares para las personas que toman celecoxib durante mucho tiempo, como un ataque cardíaco o un derrame cerebral..
La seguridad de los AINE y el dolor crónico
Todos los AINE para el dolor crónico, incluidos los que se compran sin receta, ahora incluyen advertencias de la FDA por sus posibles complicaciones. A pesar de esto, continúan siendo una de las clases más populares de medicamentos utilizados para tratar el dolor crónico..Los AINE con receta para el dolor crónico pueden recomendarse para uso a largo plazo si alguien tiene un mayor riesgo de complicaciones gastrointestinales. Estas personas pueden incluir personas mayores y cualquier persona con antecedentes de úlceras u otras complicaciones hemorrágicas.
Si toma AINE para el dolor crónico, no se sorprenda si su médico le revisa la sangre regularmente. La toxicidad potencial de los AINE se puede evitar al controlar tanto su recuento sanguíneo como sus niveles de creatina. Si sus niveles parecen no estar disponibles, su médico puede cambiar su medicamento o prescribir medicamentos adicionales para contrarrestar cualquier posible complicación..