La fatiga relacionada con la enfermedad de Hashimoto y los niveles de tiamina
La tiamina no se almacena en el cuerpo, por lo que es necesario obtener un suministro constante de alimentos y, en algunos casos, suplementos..
Deficiencia de tiamina y la tiroides
Entre los muchos beneficios de la tiamina están la regulación metabólica, la liberación de ácidos estomacales y la mejor digestión de grasas y proteínas. El cerebro y el sistema nervioso, especialmente, dependen en gran medida de la energía estimulada por la tiamina.Una de las razones por las que los pacientes de Hashimoto pueden tener una deficiencia de esta importante vitamina es que a menudo tienen poco ácido estomacal o dificultad para liberar lo suficiente como para absorber los nutrientes de los alimentos, incluida la tiamina. Los investigadores también sospechan que las personas con enfermedades autoinmunes pueden tener un desequilibrio en ciertas enzimas, lo que reduce la capacidad del cuerpo para procesar la tiamina a nivel celular.
Basado en un estudio de 2013 que encontró que la tiamina mejoró la fatiga en pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal (EII), los investigadores decidieron evaluar si la fatiga crónica observada en enfermedades inflamatorias y autoinmunes podría ser evidencia de una deficiencia de tiamina.
El estudio de 2014 incluyó a tres pacientes que estaban en tratamiento de reemplazo de hormona tiroidea para la tiroiditis de Hashimoto y que también padecían fatiga. Todos los pacientes se sometieron a análisis de sangre con tiamina libres medidos antes y después de recibir altas dosis de tiamina: 600 mg / día de tiamina por vía oral o 100 mg / ml por vía intravenosa cada cuatro días.
Todos los pacientes experimentaron una regresión parcial o completa de la fatiga a las pocas horas o días del inicio del tratamiento. Esto llevó a los investigadores a concluir que la administración de grandes cantidades de tiamina restaura los procesos dependientes de la tiamina y alivia la fatiga..
Tenga en cuenta que este fue un estudio muy pequeño y se necesita más investigación sobre la relación entre la función tiroidea y la tiamina para respaldar estos hallazgos.
Otros factores que pueden contribuir a la deficiencia de tiamina incluyen:
- Pobre ingesta dietetica
- Diabetes
- Anorexia y otros trastornos de la alimentación.
- Cirugia de perdida de peso
- Consumo excesivo de alcohol.
- Problemas de absorción digestiva.
- Desequilibrios metabólicos
- Náusea
- Dolor de cabeza
- Irritabilidad
- Depresión
- Malestar abdominal
- Beriberi (una enfermedad rara causada por una deficiencia grave de tiamina)
Fuentes de tiamina
Dependemos de nuestra dieta diaria para la tiamina, y como la vitamina no se almacena en el cuerpo, se necesita una ingesta constante en la dieta para mantener niveles suficientes.La ingesta diaria recomendada (RDI) es de 1,2 mg para los hombres y 1,1 mg para las mujeres. Los expertos creen que la mayoría de los estadounidenses obtienen suficiente tiamina de su ingesta de alimentos.
Buenas fuentes de tiamina incluyen:
- Hígado de res
- Alubias negras, cocidas
- Lentejas, cocidas
- Nueces De Macadamia, Crudas
- Edamame, cocinado
- Lomo De Cerdo, Cocido
- Espárragos
- Cereal de desayuno fortificado
- Productos enriquecidos, fortificados y de granos enteros, como pan, cereales, arroz, pasta y harina.
- Huevos
- Nueces y semillas
Una palabra de Verywell
Si su médico le diagnostica deficiencia de tiamina, aumentar su ingesta de tiamina a través de opciones de alimentos estratégicos o suplementos lo ayudará a sentirse menos fatigado.El exceso de tiamina se excreta en la orina, por lo que incluso con dosis más altas, la vitamina se considera segura. No hay informes de toxicidad de la tiamina en la dieta o la suplementación con tiamina.